sábado, 24 de agosto de 2013

Fraude y economía sumergida

España es un país con una economía sumergida de grandes proporciones. Si uno viaja a otros países, por ejemplo los nórdicos, se da cuenta de que el ciudadano medio tiene más que asumida la conciencia de cumplir con sus obligaciones para con la sociedad en forma de impuestos, impuestos que sostienen lo público (educación, sanidad, infraestructuras...).

En España, sin embargo, tenemos fraude por todas partes: el gran fraude (el de empresas importantes, por ejemplo), el mediano y el pequeño fraude (el del chapuzas que no declara y no te cobra el IVA). 

Este problema es endémico. Está tan arraigado en nuestro país y tan unido a nuestra idiosincracia que uno se pregunta si desempeña alguna función útil. Cabe preguntarse de hecho si los gobiernos en este país han puesto todos los medios a su alcance para combatir el fraude, a todos los niveles, con la mayor diligencia posible ¿¿¿???

Veamos, si yo fuera el gobierno, ¿me serviría de algo ser laxo y permisivo con el fraude fiscal?

A) De momento se me ocurre una gran ventaja: dado que hay personas que llevan años (puede que lustros) apuntados a la lista del paro oficial y no consiguen que nadie los llame para trabajar, es muy probable que el parado que pueda "ir tirando" (subsistir) haciendo esporádicas chapuzas sin declarar deje de preocuparse por sellar el paro ("total, no me sirve para nada y yo voy tirando como puedo"). ¡Bien, qué bien lo estamos haciendo, menos parados en las listas oficiales!

B) Una ventaja bastante más maquiavélica, por no llamarla dantesca es la percepción general sobre el fraude que brinda la economía sumergida, que nos hace a todos más permisivos: "Si yo defraudo a Hacienda cien o doscientos euros por no declarar mis chapuzas, es normal que otro que pueda defraudar millones de euros con, mayor razón, lo haga". Ya vemos como algo más normal las contabilidades B, los pagos en negro, las cuentas en Suiza sin declarar, etc. Vaya, el fraude, por pequeño que sea nos ha hecho corruptos. Ya estamos "pringados" nosotros también... "Han comprado nuestra alma" por una miseria.

C) ¿Es normal que el españolito de a pie tenga las tragaderas que tiene? ¿Es normal que te recorten sueldo, te suban impuestos, aumente el precio de la energía, te quiten tus derechos laborales, que aumente el paro, se venda la sanidad pública al mejor postor, la educación... y que la sociedad no explote y salga masivamente a la calle a protestar?

Pues a lo mejor tragamos tanto porque en realidad "vamos tirando". Puede que si nos estuviésemos muriendo literalmente de hambre no nos quedara otra que salir a la calle a luchar, pero a lo mejor el gobierno mismo hace la vista gorda con esto de la economía sumergida porque le conviene que ésta actúe como válvula de escape: "mientras yo pueda ir tirando haciendo chapuzas, ¿para qué me voy a meter en protestas ni en jaleos? Que hagan lo que les dé la gana con el país"

A lo mejor me he levantado con una forma de pensar muy retorcida, ¿pero y si tengo razón?



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